Mientras la flota de vehículos eléctricos e híbridos enchufables crece, las instituciones locales y la iniciativa privada trabajan para ofrecer puntos de recarga
Estamos en un momento de transición energética, lleno de incertidumbres. La industria del automóvil tiende de forma explícita hacia la electricidad, pero la gente no acaba de confiar. Uno de los motivos es la infraestructura de recarga. En Lanzarote hay, según la Cámara de Comercio, una flota de medio millar de vehículos eléctricos e híbridos enchufables y unos veinte puntos de acceso público y gratuito, aunque no todos están operativos.
Tres de ellos los ha dispuesto el Cabildo. Son gratuitos y con energía verde certificada, según afirma la consejera insular de Energía e Industria, Ariagona González. Se encuentran en la avenida principal de Arrieta; frente a la estación de guaguas de Playa Blanca y en el Monumento al Campesino, en Mozaga. También los ayuntamientos y algunos centros comerciales están instalando puntos de recarga.
González apuntó que “la idea con estos puntos de recarga es que los usuarios de estos vehículos, turistas o residentes, estén tranquilos de que no se van a quedar tirados. Y contemplamos ofrecer también en los Centros de Arte Cultura y Turismo, aunque será para principios de 2023”. “El Cabildo –añadió- ha sido abanderado en el uso de vehículos eléctricos y de energías renovables por convencimiento ecológico y también como herramienta de concienciación medioambiental”.
La consejera señaló igualmente que “los ayuntamientos, gasolineras y algunos centros comerciales han instalado puntos para sus clientes o lo están haciendo”, y apeló a la participación de la iniciativa privada para que “Lanzarote disponga de una infraestructura suficiente y eficaz”. Al margen de la red de recarga eléctrica, para la que esperan poder instalar más aerogeneradores, “estamos atentos a otras fuentes como el Hidrógeno. A contemplarlo como proyecto experimental”, concluyó.
Desde la iniciativa privada, la Cámara de Comercio de Lanzarote dispone desde hace unos años de un punto de recarga con energía fotovoltaica y ha abierto una Ventanilla Única de Energías Renovables, VUER, desde la que lleva tramitadas más de cincuenta solicitudes de ayuda del Plan Move III para la adquisición de vehículos eléctricos.
En una línea similar, la patronal alojativa, Asolan, también se suma a las energías renovables y estudia la implantación de aerogeneradores y huertos solares. E, igualmente, está inventariando cuántos de sus asociados disponen de punto de recarga para sus clientes, con la idea de promover su proliferación en los hoteles de la isla.