Enferma desde los 21 y cinco veces a punto de no contarlo, María Dolores Lasso, Lola, tiene la incapacidad total y dedica toda su vida, tiempo y esfuerzo a la Asociación Española Contra el Cáncer
Al frente de la Asociación Española Contra el Cáncer (colabora.contraelcancer.es) en Lanzarote desde hace tres años, fue ella misma quien gestionó la conformación de esta delegación. “Estando ingresada en Gran Canaria, observé cómo ex pacientes de cáncer estaban en la unidad oncológica como acompañantes y llevaban un carrito con infusiones. Su conversación, su experiencia y sus ánimos resultaban tan motivadores que quise traérmela a Lanzarote”, explica María Dolores Lasso, Lola.
“Esta es una asociación de ámbito nacional que trabaja en atender a los enfermos de cáncer y a sus familiares. Invertimos en investigación y damos becas a investigadores para subir el porcentaje de curados, que está en un 53%, hasta un 70%”, explica Lasso, quien apuntó asimismo que esta enfermedad afecta ligeramente más a hombres que a mujeres, siendo el de mama el más extendido entre la población femenina y el de próstata, entre la masculina.
“Recibimos alguna ayuda institucional –prosigue- pero obtenemos la mayor parte de nuestros recursos de los socios. También de las donaciones, que todo suma. Y puede hacerla cualquier persona a través de la web o bien cuando salimos a la calle con nuestras huchas y los lacitos rosa. Por ejemplo, el 8 de mayo, día de ‘la cuestación’. No hay una cifra, cada uno da lo que puede. Pero por donaciones superiores a cien euros emitimos certificado”.
“Por supuesto, todos los servicios son gratuitos y no hace falta ser socios para recibir nuestra ayuda. Hay gente que hasta ha prestado una vivienda. Igualmente, hemos sacado la iniciativa para empresas ‘Activas contra el cáncer’. A las que participen cada año con una aportación les ponemos una placa que las certifica como colaboradoras”.
Asegura Lola que hace todo esto “porque conozco de primera mano lo mal que se pasa y también lo que sufren los familiares cuidadores. Yo enfermé a los 21 y he estado cinco veces a punto de morir. En una de ellas, me casé en el hospital. Ahora tengo la incapacidad total, dispongo de tiempo y lo invierto todo en ayudar. Total, ¿qué es una raya más para un tigre?”.
