El 21 de mayo se celebra la cita deportiva del año en la isla, una prueba que ha generado afición y se ha convertido en abanderada de su promoción turística
Definitivamente, el Ironman ha transformado Lanzarote. Desde su primera edición, el 30 de mayo de 1992, este durísimo deporte ha ganado cientos de adeptos en la isla; por su altísima exigencia es el segundo más duro del mundo; y para Lanzarote es una de sus principales banderas de promoción turística. Atrae en cada edición a miles de personas entre participantes y público, y durante todo el año, para entrenar.
En 1992 participaron 148 triatletas, acabando 116. En 2012 fueron 1.690; 1.800 en 2013; se reventó el techo en 2014, con 2.290; y en 2016 tomaron la salida 1.900 triatletas.
Los vencedores en 1992 fueron la estadounidense Janine Daley (10:45:07) y Ben Van Zelst, de Países Bajos, (09:01:43). Comenzó en Playa Blanca. El cambio de bici a maratón se hizo en Costa Teguise y terminó en Puerto del Carmen. También bajaron los cronos. El récord absoluto lo ostenta el alemán Timo Bracht, con 8.30.34 (2011) y el primer ganador español fue Eneko Llanos (08:49:38), en 2007.
En esta 30 edición, la prueba de natación, 3.8 Km. en la Playa Grande de Puerto del Carmen, comienza a las 7.00 horas con el método de salida progresivo ‘Wave Rolling Swim Start’. Las otras dos pruebas comienzan y terminan en la meta de la Avenida de Las Playas, en esta misma localidad. La bicicleta, con 180,2 Km. contempla siete puntos de avituallamiento; y la maratón, 42,2 Km, tres. El recorrido, de tres vueltas por la Avenida de Las Playas, ha llegado en las últimas ediciones hasta Playa Honda.
