En los vinos como en la moda, también hay tendencias y ahora se llevan los vinos con menor graduación y más fáciles de beber
Más refrescantes, más sofisticados y elegantes. Se reinterpretan los clásicos, gana protagonismo el café, se incorporan ingredientes fermentados, ahumados y especias, más bajos en alcohol o ‘sin’. Nuevos sabores. Nuevas sensaciones… Así viene el verano 2025 en tu copa.
Exclusividad reinterpretada, como en el elegante Negroni Blanco, con ginebras y vermuts Premium; o los mojitos, caipirinhas o en la piña colada, preparados con destilados de alta gama.
El café se incorpora a algunos cócteles aportando complejidad y profundidad a los sabores. El Espresso Martini combina vodka, licor de café y espresso. También entran en juego ingredientes fermentados y ahumados como kimchi o la kombucha. O bien reducciones de vinos dulces o vinagre balsámico para añadir un toque umami. Y, mediante la técnica fat-washing, se infusionan grasas como la mantequilla dorada o aceites esenciales de hierbas aromáticas, que aportan textura y profundidad.
Los mini martinis son una forma de probar diferentes estilos de martini (vermut), añadiendo botánicos o en combinaciones, que añaden complejidad. El Spritz es una combinación ligeramente amarga, del Campari; con un toque dulce, Aperol, en una base de vino (blanco seco), prossecco y soda. A partir del clásico, ha ganado mucha popularidad la variante Hugo Spritz, con vino espumoso, sirope de flor de saúco, soda y menta fresca.
Bajo en alcohol, el cóctel de sandía y menta es una combinación refrescante y ligera que se prepara con puré de sandía, un toque de vodka, jugo de lima y menta fresca. ¿Lo quieres sin alcohol? Quitamos el vodka e incorporamos ginebra 0,0%.
Y en la línea de sabores innovadores… El Moscow Mule lleva vodka, jugo de lima y cerveza de jengibre (ginger ale) dulce y picante. Se utiliza para combinarlos una pequeña taza de cobre. Y tiene variantes… Mexican Mule, con base de tequila más rodajita de lima y jalapeño. Lo demás, como en todas las variantes, igual que el original.
Kentucky Mule, con bourbon. El Blood Orange Mule, añade al clásico jugo de naranja sanguina. El Blueberry Mule, con vodka de arándanos o con arándanos frescos. Y el Tropical Mule, con base de ron o de cachaça, más 30 ml de jugo de piña y hojas de menta y/o una rodaja de piña para decorar.
