El método KO entrena y mejora cuerpo, mente y emociones tomando lo mejor de cuatro disciplinas: boxeo, artes marciales, ‘bootcamp’ y yoga
La filosofía del método de entrenamiento KO va más allá de lo físico, pues mejora el estado de ánimo volviéndote una persona más alegre, más feliz. Fusiona la parte física de cuatro disciplinas: boxeo, artes marciales, ‘bootcamp’ y yoga, pero para sacarle el máximo partido es fundamental, además, establecer una conexión interior, una alimentación consciente y una actitud positiva.
Del boxeo, con cardio intenso, toma la agilidad que te genera entrenar la esquiva y la capacidad y velocidad de respuesta. Del entrenamiento militar, ‘bootcamp’, muy funcional y duro, ‘extrae’ la fuerza física y también la mental y emocional. De las artes marciales, en concreto del taekwondo, su capacidad de enfocarse. Una facultad que también se logra y se potencia con el yoga.
La importancia de mirar y calmar primero dentro antes de mirar hacia fuera calma tu mente. Lo logra porque cambia tu percepción ante los problemas. Cuando uno aprende a respirar, a controlar el flujo de aire, puede cambiar su velocidad y apaciguarlo.
Te das cuenta de que no puedes controlar el entorno ni a las personas, pero puedes elegir cómo reaccionar ante los estímulos que generan. Cómo cambiar la perspectiva. Problemas nos sobran a todos, pero eres tú quien decide en qué te enfocas. El yoga te da esa forma de encontrarte contigo misma/o y entender que todos podemos parar y estar contentos ahí adentro. Así nace la idea del sistema de entrenamiento KO.
Se trata de entrenar para ser feliz. Para liberar la cabeza de problemas y de miedos. Entrenamos del cuerpo a la cabeza para sentirnos poderosos y a la vez encontrar la calma. Se suda para desintoxicar el cuerpo. Se focaliza la mente para limpiar las emociones. Te trae al presente, te abstrae del pasado y del futuro y te saca una sonrisa que ya se te queda.
