La revista bilingüe de Lanzarote

Calor de exterior sostenible

Los calefactores infrarrojos están entre las opciones más ecológicas y eficientes para terrazas o jardines en esta época del año

Únicamente se puede hablar de calefacción exterior sostenible cuando los dispositivos empleados se alimentan con electricidad procedente de fuentes de energía renovables. Algo factible en Canarias tanto en el caso de placas solares fotovoltaicas de autoconsumo, por su clima espectacular, como de un aerogenerador dada la alta frecuencia de vientos en las islas. En estas circunstancias, los radiadores eléctricos por infrarrojos son una opción excelente.

Y lo son porque no emiten CO2 y no requieren mantenimiento ni almacenamiento de combustible. Otra ventaja de este tipo de estufas es su menor consumo de energía. Algo mejorable si se complementa con cerramientos parciales o totales, para que puedan ofrecer calor trabajando a la mitad (o menos) de potencia.

Para elegir el calefactor de infrarrojos adecuado a tus necesidades, con el radio de acción adecuado y la eficiencia óptima, debes saber las dimensiones del espacio donde irá colocado. Dentro de sus características, contempla el método de accionamiento o su disponibilidad de instalación en exteriores (aislamiento). La mayoría de modelos van con cadenas aunque también los hay con mando a distancia.

Un ejemplo perfecto para entender cómo actúa este tipo de calor es la radiación solar. El sol emite luz visible (radiación UV) y calor por radiación infrarroja (invisible). Calienta el aire y también los cuerpos, más directa y profundamente. Como cuando pasamos de la sombra al sol. Este tipo de calor (con lámparas) se utiliza en terapias de rehabilitación para la recuperación de lesiones musculares.

Los mejores calefactores infrarrojos para exteriores son los modelos con resistencia IP certificada al agua. Son impermeables y resistentes a las condiciones meteorológicas, bajas temperaturas, lluvias, altos vientos, etcétera. A la radiación directa (penetración profunda) de un infrarrojo halógeno no le afecta el viento u otras inclemencias del tiempo.

Entre otras tantas ventajas de los calefactores infrarrojos está que no resecan el aire, son silenciosos, no consumen oxígeno ni tampoco generan olores desagradables. Son, asimismo, menos propensos a generar condensación dentro de casa y pasan de cero (apagado) a su máxima potencia en sólo cinco segundos.

Al margen del calor infrarrojo, también pueden considerarse una opción sostenible las estufas de leña o cualquier otro biocombustible como el pellet (biomasa).

Debes leer

Artículo anterior
Artículo siguiente