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De las otras Highlands

El whisky escocés ‘single malt’ está en la cumbre de la excelencia, pero le ha surgido un competidor al otro lado del planeta. Hablar de whisky japonés en Europa pasa por mencionar a Nikka y Suntory, las dos grandes compañías que copan el mercado interior y la exportación.

Ambos ofrecen un altísimo estándar de calidad, pero el whisky japonés tiene un sabor más refinado y sutil, así como más riqueza en matices. En ambos casos, el agua empleada es de una pureza extraordinaria y, curioso, los japoneses importan cebada escocesa mientras los escoceses la traen de Europa del Este. Los escoceses utilizan la turba para el malteado de la cebada y tiene presencia en los aromas y el sabor. En los japoneses, está destinada a un grupo reducido.

El mejor whisky japonés de 2022 es el Yamazaki ‘single malt’ 12 años, de Suntory. Está envejecido en barricas de roble español, americano y escocés, lo que le brinda unas notables cremosidad, sutileza y un amplio abanico de matices. De sabor suave y, en conjunto, bien armonizado a pesar de su 43% (alcohol).

En nariz destacan notas florales, vainilla, fruta tropical y un toque cereal. En boca es intenso y redondo, rico en matices. Dulzura frutal en primer término, un punto especiado después y final largo, suave, frutal, con un toque seco y amaderado.

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