En verano nuestro cutis queda expuesto y vulnerable a muchos factores externos agresivos que causan un envejecimiento precoz. ¡Prepáralo!
Largas exposiciones a los rayos solares y al calor, tanto al broncearte como en actividades cotidianas, favorecen la deshidratación, una pérdida de luminosidad y la aparición de arrugas y manchitas solares que dan un aspecto envejecido a tu piel. Una manera de minimizar esos efectos nocivos es preparar tu piel aportándole vitaminas y antioxidantes. La alimentación es una de las maneras. La medicina cosmética, la otra.
El cóctel vitamínico actúa sobre todo el bienestar de la piel. Recupera su hidratación y luminosidad, también su tonificación y elasticidad. Mejora su textura y funciona como relleno natural, potencia la producción de colágeno, mejora la microcirculación y activa la regeneración de las células.
De forma general, este tipo de tratamiento con finalidad protectora a base de microinyecciones se conoce como mesoterapia infiltrada con vitaminas. Al tratarse de medicina estética, sólo puede ser aplicado por profesionales acreditados. Se realizará un diagnóstico y se aplicarán las vitaminas y principios activos necesarios.
Entre sus beneficios, devuelve el brillo y regenera la piel para que ésta luzca mucho más tersa y joven. Este tratamiento es unisex, mínimamente invasivo y prácticamente indoloro, a la vez que tiene muy baja o nula incidencia alérgica ni causa reacciones adversas.
Las distintas firmas estéticas afinan las técnicas. Por ejemplo, Ability Salud sugiere un tratamiento llamado ‘Cóctel de vitaminas’ con microinyecciones faciales de una selección de vitaminas específicas que nutren la piel desde dentro. Los principios activos más recurrentes en estos tratamientos son las vitaminas A, B, C y E, además de la coenzima Q10 y el ácido ferúlico.
La opción de la dieta, que no es excluyente sino complementaria, contempla el consumo de alimentos ricos en antioxidantes y betacarotenos. Generalmente, frutas y verduras de color anaranjado o rojizo como la zanahoria, el albaricoque, la calabaza o pimientos o las verduras y hortalizas de color verde oscuro como el brócoli, espárragos o las espinacas.
Igualmente importantes son los ácidos grasos como el Omega 3 que tiene el aguacate, rico también en antioxidantes y vitaminas A, C y E, que nos ayudará a mantener nuestra piel joven y suave. Lo mismo que las espinacas, ricas en betacaroteno, vitamina A, B, C y ácido fólico, protegen la piel frente a los rayos solares.