Este estilo decorativo, traducido al español como ‘misterioso’, se basa en el uso de colores fríos líneas limpias, acabados impecables y la incorporación de materiales elegantes como el acero o el mármol, en acabados brillantes e iridiscentes.
Eerie combina lo sobrenatural con lo refinado desafiando las convenciones estéticas con una paleta de tonos oscuros y texturas lujosas. Una estética más allá del misterio que también transpira elegancia y sofisticación.
Azul profundo, gris plomizo y negro intenso para crear una atmósfera de serenidad sombría y contemplación. Las tonalidades frías proporcionan una base perfecta para la introducción de materiales nobles. El acabado pulido y la apariencia industrial del acero lo convierten en un material clave en la decoración Eerie. Desde lámparas colgantes hasta muebles auxiliares, agrega un elemento de modernidad y solidez a los ambientes y sus reflejos metálicos crean fascinantes juegos de luz y sombra.
En contraste, el mármol, con su elegancia atemporal y su textura suave, aporta una sensación de opulencia y refinamiento a cualquier espacio. Ya sea en forma de mesas de centro, encimeras o detalles decorativos, añade el toque de distinción.
Completa con luces indirectas y regulables, ideales para crear una atmósfera envolvente y misteriosa, permitiendo jugar con las sombras y resaltando los detalles de los materiales.